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Imprescindible, Asegurar La Independencia De Órganos Reguladores

Amedi
diciembre05/ 2016

12 de agosto de 2013

Imprescindible, asegurar la independencia de órganos reguladores

El pasado 9 de agosto el Comité de Evaluación entregó al Presidente de la República las listas de aspirantes para integrar el Instituto Federal de Telecomunicaciones y la Comisión Federal de Competencia Económica ambos con autonomía constitucional. Cada lista está conformada por cinco candidatos  por cada uno de los siete lugares previstos para cada instancia.

La importante reforma constitucional que se promulgó en junio pasado hace descansar en el nuevo Instituto Federal de Telecomunicaciones buena parte del destino de las telecomunicaciones y la radiodifusión en nuestro país. Frente a la ausencia de recursos y la supeditación respecto del gobierno que han padecido hasta ahora las autoridades en esas materias, la reforma constitucional diseñó un organismo fuerte y con sólidas atribuciones.

Por eso resulta indispensable que los siete comisionados que encabezarán al IFETEL tengan experiencia e independencia suficientes, tanto respecto del gobierno y los partidos políticos como respecto de las empresas a las que deberán regular.

La propia reforma constitucional establece salvaguardas para esa independencia y un procedimiento que debería haber desembocado en una selección incuestionable. Lamentablemente los organismos encargados de ese proceso –INEGI, Banco de México e Instituto Nacional para la Evaluación Educativa, no actuaron con la transparencia y quizá tampoco con la imparcialidad que exigen la Constitución y que los ciudadanos merecemos.

El resultado ha sido la presentación de listas, de entre las cuales serán seleccionados los nuevos comisionados, acaparadas por funcionarios y ex funcionarios que no tienen la diversidad política ni profesional que se requiere para conducir al IFETEL. Otros aspirantes incluidos en las listas, han estado ligados a las empresas que ahora buscan regular. Personeros de empresas telefónicas, asesores de televisoras e incluso una ex directora de la Cámara Nacional de la Industria de la Radiodifusión recibieron el beneplácito del Comité de Evaluación. Dicha selección contradice el recientemente reformado  artículo 28 constitucional que establece que es indispensable: “no haber ocupado, en los últimos tres años, ningún empleo, cargo o función directiva en las empresas de los concesionarios comerciales o privados o de las entidades a ellos relacionadas, sujetas a la regulación del Instituto”.

En cambio hay pocos especialistas en derecho de la información y, sorprendentemente, casi ningún ingeniero. Muchos funcionarios del gobierno anterior y del actual, entre ellos algunos de los responsables del estancamiento y la complacencia con intereses privados que han dominado en las telecomunicaciones, dominan en esas listas.

Exigimos que el Comité de Evaluación publique la relación completa de aspirantes que presentaron examen, las calificaciones de cada uno de ellos y los criterios con los que además de ese requisito, se tomaron en cuenta experiencia, trayectoria y el trabajo escrito que debieron presentar.

De cada una de esas listas, el Presidente de la República deberá proponer un candidato al Senado. Las listas de aspirantes ya tienen muchos defectos, resultan de un proceso opaco y están definidas por una inquietante parcialidad. Exhortamos al presidente Enrique Peña Nieto y a los senadores para que asuman con toda responsabilidad esta selección y que propicien que el nuevo organismo regulador de las telecomunicaciones sea independiente de intereses políticos y empresariales. Lo contrario, sería una prematura y lastimosa contrarreforma.

México, D. F. 12 de agosto de 2013.

Asociación Mexicana de Derecho a la Información